lunes, 15 de octubre de 2007

Reseña: Spiderman: Reino

SPIDERMAN: REINO
Guión: Kaare Andrews
Dibujo: Kaare Andrews
Edición original: Spider-Man: Reign 1-4
Fecha de venta: septiembre de 2007
Formato: 100 % Marvel. 160 páginas.
Precio: 13.00 €
Editorial: Panini.

Texto promocional de la editorial:

Una ardiente visión del futuro de Spiderman, realizada por la superestrella de las portadas Kaare Andrews (The Incredible Hulk). Al fin lo han conseguido. Les han dejado en el arroyo. Ya no hay espacio en la Gran Manzana para los justicieros enmascarados. ¿Y qué ha sido de Peter Parker? Ni siquiera puede recordar la sensación de balancearse por los tejados, y tampoco quiere hacerlo. Después de todo, no le queda nada por lo que luchar. ¿O tal vez sí? Entonces, un viejo “amigo” aparece ante su puerta, con un paquete y un mensaje... Y todo cambia.

¡Vaya tela! Ésta fue mi primera impresión cuando leí unas pocas páginas de este cómic que el señor Kaare Andrews se ha sacado de la manga cual Juan Palomo: yo me lo guiso, yo me lo como. Que si argumento, que si guión, que si dibujo, de todo me encargo yo. Voy a hacer la obra cumbre del arácnido intentando emular a un clásico en todos los aspectos: me encargaré yo de todo (como Miller), dibujaré como el culo (como Miller) y los hechos tendrán lugar en un momento en que Spiderman debería estar jubilado en vez de andar dándose de leches con todo bicho viviente.

Ya que estoy en plan negativo prosigo. Lo peor del cómic es el dibujo. Es auténticamente insufrible. Esos fondos en tres dimensiones hechos por ordenador contrastan con un dibujo desganado que no aporta nada a la trama. Un auténtico desastre.

Otro aspecto negativo es el tufillo a plagio que tiene lugar a lo largo del cómic. El autor probablemente se excusaría utilizando el término “influencias” para que nadie diga que se ha basado en Regreso del Señor de la Noche de Frank Miller para realizar este truño, pero el problema es que no ha pillado ninguna de las virtudes del clásico.

Está más que visto ese futuro apocalíptico que nos pintan siempre de caos absoluto, resignación de las personas ante un estado fascista que los tiene subyugados y pendientes de que alguien los salve sin que tengan que mover un dedo. No hay ninguna originalidad en el argumento que nos haga recordarlo unos segundos después de pasar la última página.

No todo va a ser malo en Spiderman: Reino. Como historia no funciona mal del todo, es entretenida aunque alargada en demasía. Sus últimas páginas arreglan un poco el resto del cómic pero dejan un final abierto como si el autor quisiera disculparse por lo que ha hecho y permitir así que otro valiente cuente el verdadero final del trepamuros. Quizás ese final digno lo encontremos de la mano de Strackzinsky y John Romita Jr. con su próximo Spiderman: The End pero hasta que lo veamos, mejor olvidarnos del cómic que acabo de reseñar para no empezar a leer el siguiente “definitivo final” cabreados y con una ligera sensación de estafa.

Valoración personal sobre 10: 4.

Lo mejor: No sabría destacar nada.

Lo peor: Aunque me repita, el dibujo.

No hay comentarios: